Navegando las dinámicas de las jerarquías y opiniones en las reuniones organizacionales.

En el mundo de los negocios y el liderazgo, la comunicación efectiva es fundamental. Las reuniones sirven como una plataforma crucial para la toma de decisiones, la resolución de problemas y el intercambio de ideas. Cada empresa tiene su propia manera de hacerlo, y esto es una mezcla de factores culturales que varía según factores como industria, nacionalidad, antigüedad.

Sin embargo, existen algunas verdades comunes que podemos extraer para mejorar la calidad del intercambio. 

Hablemos entonces de qué sucede cuando, como líder de una reunión, hablas último en lugar de primero, y explicaremos cómo puede impactar positivamente en las jerarquías y opiniones en las reuniones empresariales.

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1. Fomenta una cultura de inclusividad

Permitir que los miembros del equipo expresen sus pensamientos antes de que hable el líder fomenta una cultura de inclusividad. Cuando los líderes hablan primero, existe el riesgo de que sus opiniones puedan opacar las de los demás, sofocando perspectivas individuales. 

Al hablar al final, los líderes señalan que cada voz es valorada, creando un entorno donde los miembros del equipo se sienten escuchados y respetados.

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2. Permite el diálogo abierto

Que los líderes hablen al final promueve el diálogo abierto al dar a los miembros del equipo la oportunidad de compartir sus ideas sin la influencia de la posición del líder. Esto puede llevar a discusiones más honestas y diversas, ya que es menos probable que los miembros del equipo se conformen con el punto de vista del líder. 

Esto McKinsey lo llama “el efecto girasol”. Como la planta, todos terminan mirando hacia el sol al hacerse ver su presencia.

Como líder, hablar al final también te permite guardar tus cartas hasta el momento correcto. Es posible que oír otras opiniones antes de tu turno cambie tu perspectiva.

No tomes nuestra opinión, deja que un tal Jeff lo haga por nosotros:

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3. Construye Confianza y Empoderamiento

Cuando los líderes hablan al final, envían un mensaje poderoso de confianza y empoderamiento. Los miembros del equipo se sienten confiados para contribuir con sus ideas, sabiendo que sus opiniones son valoradas y se considerarán en el proceso de toma de decisiones. Esto fomenta un sentido de propiedad y compromiso entre los miembros del equipo, ya que se perciben a sí mismos como contribuyentes activos al éxito de la organización.

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4. Aprovecha la Inteligencia Colectiva

Los líderes que hablan al final aprovechan la inteligencia colectiva del equipo. Al permitir que emerjan perspectivas diversas antes de compartir sus propios pensamientos, los líderes aprovechan la riqueza de conocimiento, experiencia y creatividad presentes, lo que a menudo conduce a soluciones más innovadoras y estrategias bien fundamentadas.

Es importante destacar que los líderes son los más adecuados para dar un cierre a la reunión. Son quienes están en la posición para enhebrar los distintos puntos de vista e hilar el telar sobre el cual se construirán los siguientes pasos.

Unsplash | Jose Castillo

Hasta aquí dejamos bien en claro las ventajas de tomar la última posición, pero hay un asterisco.

Es también una misión del líder establecer el tono y objetivos que esta reunión tiene. Esto puede ser hecho por él/ella mismo o puede delegarlo. Lo importante es plantear un escenario de intercambio acorde a lo que se pretende lograr, y encauzar las idas y venidas hacia un punto final. No hay que confundir esto con intervenir desde el minuto cero con opiniones que condicionen el grupo.

Recuerda que no sólo por hablar último o primero eres líder. Poder elegir tu posición para hablar es un privilegio del que gozas, y debes usarlo para maximizar los resultados de la plática.