Diciembre es sinónimo de vacaciones y descanso, porque buena parte de todos los sectores se toman una pausa para la temporada navideña. Sin embargo, pensar en vacaciones o en descansar no debería ocurrir únicamente a final de año. De hecho, cualquier momento es bueno para tomarse unas vacaciones, no solo porque mejora el rendimiento y la creatividad de las personas, sino porque descansar podría salvar tu vida.

No exageramos. Tomar vacaciones y viajar está relacionado con una mayor satisfacción de vida, mayor creatividad, mejor cognición y hasta un menor riesgo de sufrir enfermedades cardíacas

Sin embargo, Latinoamérica no es un ejemplo de descanso. De acuerdo con cifras de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Colombia y México son los países donde más horas se trabajan en el mundo

Mientras que en Alemania y Dinamarca las personas trabajan 1.341 y 1.372 horas anuales respectivamente; en 2022 los colombianos trabajaron un total de 2.405 horas. A este país lo siguió México con 2.226 horas, Costa Rica con 2.149 y Chile con 1.963 horas. 

Y aunque ser laborioso pueda ser visto como una cualidad, trabajar de más es completamente dañino. Así lo mostró una investigación global de la Organización Mundial de la Salud que encontró que trabajar 55 o más horas cada semana está asociado con un 35% más de riesgo de infarto y 17% mayor riesgo de morir de una enfermedad cardíaca que aquellos que trabajan entre 35 y 40 horas.

Con esto en mente, queremos compartirte los varios beneficios mentales y físicos que ofrece un bien merecido descanso.

Ayuda a liberarse del estrés (evidentemente)

Pero liberarnos del estrés no es su único impacto en nuestra salud mental. Se sabe, por ejemplo, que también alivia la ansiedad y la depresión, al apartar a las personas de los factores que les fomentan estas emociones.

Una investigación hecha a 800 abogados en Canadá mostró que las vacaciones reducían la depresión y el estrés laboral. Y hay una mejor noticia: no importa el tiempo que tomes para descansar. De acuerdo con un artículo de APA, incluso un viaje de tres días ha mostrado reducir los niveles de cortisol (“la hormona del estrés”) en las personas.

Viajar te hace estar presente y potencia tu inteligencia

La disminución del estrés tiene un efecto secundario y positivo: mejora la flexibilidad cognitiva. Esto fue lo que encontró la investigación de una compañía alemana, en la que a algunos trabajadores se les pidió decir el mayor número de usos posibles para algunos objetos dados. 

De acuerdo con CNN, tras un periodo de dos o tres semanas de descanso, los trabajadores  “fueron capaces de pensar un mayor número de usos para los objetos comparado con los resultados obtenidos un par de semanas antes de sus vacaciones”.

Además, viajar desactiva el pensamiento mecánico y fomenta una sensación de presencia y consciencia con el mundo. “Cuando viajamos, usualmente rompemos nuestras rutinas. Esa familiaridad disminuida es una oportunidad para la mayoría de personas para estar más completamente presente, para realmente despertar”, explica el doctor Richard Davidson, profesor de psicología y psiquiatría de la Universidad de Wisconsin.

Además, un estudio hecho a 3.000 canadienses mostró que más vacaciones pagas repercutió positivamente en el bienestar general y satisfacción de vida de los trabajadores. Incluso, encontraron que las experiencias que se tienen en vacaciones se recuerdan más felizmente y durante más tiempo, lo cuál mejora los estados de felicidad en el presente.

Receta perfecta para el corazón

Pero los beneficios de tomar un descanso no son sólo mentales. Una investigación del instituto Framingham Heart Study mostró que existe una correlación entre tomar más vacaciones y tener menor riesgo de enfermedades y condiciones cardíacas. Durante nueve años, los sujetos que no tomaron tantas vacaciones, fueron 30% más susceptibles de tener ataques cardíacos. La investigación también reveló que incluso no tomar vacaciones durante un año aumenta el riesgo de enfermedad del corazón

Algo similar encontró el CDC de Estados Unidos, que revisando los casos de 1.400 mujeres, encontró que aquellas que tomaban menos de un descanso cada seis meses, tenían hasta ocho veces más de probabilidades de tener un infarto que las que descansaban al menos dos veces cada año.

Si bien los beneficios de las vacaciones para la salud cardíaca se conocen desde 1992, la recomendación de cardiólogos como Anand Rohatgi es tomarse en serio el momento de descanso. “Incluso si tomas un descanso, puedes seguir estando en tu pantalla con constantes llamadas y correos. Gastar tiempo en otro lado pero seguir revisando todo el tiempo puede disminuir los beneficios que crees que tiene”.

Descansar ayuda a trabajar mejor

No debería sorprendernos, pero no trabajar puede ser la clave para hacer mejor nuestro trabajo. Así lo mostró un estudio hecho por el Boston Consulting Group, que encontró que “los profesionales a los que se les pedía tomar más tiempo de descanso, eran significativamente más productivos que aquellos que pasaban más tiempo trabajando”, de acuerdo con la doctora en psicología Andrea Robinson.

Otra investigación mostró que los trabajadores reportaron que hacer sus quehaceres laborales les tomaba menos esfuerzo tras volver de vacaciones.

Además, tomar vacaciones es un potenciador de la creatividad. Para Brigid Schulte, autora del best-seller ‘Overwhelmed: Work, Love and Play when No One has the Time, which was named a Washington’, la neurociencia ha dejado en claro que los momentos ‘eureka’ llegan cuando estamos en un estado de mente relajado.

Esto lo respaldan los resultados de una investigación de 2021 que mostró que dos semanas después de regresar de vacaciones, los empleados sentían que eran más creativos que antes del descanso.

Así también lo confirma el famoso músico y artista Lin-Manuel Miranda, quien confesó que la idea para la afamada ópera Hamilton llegó mientras descansaba. “No es un accidente que la mejor idea que he tenido en mi vida —tal vez la mejor que tendré en toda mi vida— llegara en vacaciones. En el momento en que mi cerebro descansó, Hamiltón apareció”.


Si luego de todos estos beneficios sigues sin estar seguro de la necesidad de un descanso, piensa que vacaciones no deben ser sinónimo de perderse durante semanas. Descansar puede ir desde un par de horas hasta un buen fin de semana, como afirma el profesor Richard Davidson: “Las investigaciones muestran claramente que incluso estar en un espacio verde por 10 minutos tiene un efecto demostrable en el cerebro, comparado con pasar los mismos 10 minutos en calles de ciudad”.